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9 de mayo de 2013

¿Sociedad Concursada = Sociedad Liquidada?


El pasado mes de febrero fueron publicadas por el INE, las estadísticas concursales correspondientes al cuarto trimestre de 2012, en las que se reflejan una serie de conclusiones que nos indican lo duro que ha sido el año 2012 para las empresas en España.

A modo de conclusión, se observa que el número de concursos ha aumentado un 39% respecto al mismo periodo del año anterior, situándose en 2.444 deudores concursados, confirmándose la tendencia alcista de los mismos.

Pero en España son muy pocas las compañías que acuden al concurso como solución a los problemas de insolvencia o como medida de satisfacción razonable a sus acreedores (aproximadamente dos de cada 100 empresas que desaparecen pasan por el concurso). 
Considero que el problema radica, en parte, en la etiqueta que asocia "sociedad concursada = sociedad liquidada", esto hace que en muchos casos, las empresas no quieran solicitar el concurso voluntario, y traten de solucionar el problema “internamente” hasta que finalmente la insolvencia es tan evidente que algún acreedor insta el concurso necesario, cogiendo con el pie cambiado a la Sociedad concursada. 
La solicitud de concurso debería realizarse en los primeros momentos de insolvencia. Si esto fuera así, el porcentaje de empresas concursadas que saliera del concurso de forma razonable, continuando su actividad y con quitas y esperas bajas y razonables, sería muy superior.
Otro dato referente a la encuesta que entiendo puede llamar a engaño, es el relativo a la estructura de las empresas que entran en concurso. Según las cifras publicadas por el INE, la mayoría de empresas con menos de 2 millones de cifra de negocio y con menos de 20 empleados, es decir, micropymes, son las que entran en concurso. Una lectura podría ser que este tipo de empresas no poseen la estructura de las grandes empresas y posiblemente estén peor preparadas para situaciones de insolvencia. Creo que este dato es simplemente reflejo de la proporción general de nuestra economía en la que micropymes de estas características, confirman la inmensa mayoría del tejido empresarial, y por mera estadística, el número de concursos en esta franja debe ser superior.
Estas empresas, si bien suelen tener menor colchón financiero, también pueden adaptarse mejor a las vicisitudes adversas y ser más flexibles, para evitar precisamente entrar en situaciones de insolvencia.
La estadística publicada puede verse en el siguiente enlace: Estadística Concursal INE

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