En España es especialmente difícil emprender por la complicada burocracia que conlleva, pero una de las quejas más extendidas y habituales a la hora de darse de alta como autónomo es la cuota mensual que hay que pagar. La cuota por la base mínima ronda los 250 € hasta los casi 300€ con las coberturas de accidentes y las coberturas de paro de autónomos. y para muchos es un obstáculo puesto que les supone un gasto fijo, independientemente de que tengan ingresos o no, consigan beneficios o no. La cuota hay que pagarla y es obligatoria desde el primer momento.
Con la noticia de la tarifa plana en las cotizaciones de 50 euros para los jóvenes emprendedores, menores de 30 años, con la curiosidad latente nos hemos hecho una pregunta: ¿Cómo funciona la cotización de autónomos en el resto de Europa? ¿Tenemos las mismas condiciones?.
- En Holanda no existe una única cuota de autónomos. Tendrán que inscribirse en la Cámara de Comercio y pagar una cuota única anual cuyo importe es de 50€. No incluye cobertura de ningún tipo, tendríamos que contratar un seguro de asistencia sanitaria de unos 100€ mensuales por persona, además de los seguros de pensión, fallecimiento e invalidez.
- En Alemania darse de alta cono autónomo asciende a unos 140 euros y en caso de no llegar a los 1.700 euros de beneficio neto, no pagan impuestos. Los trabajadores autónomos no tienen ninguna cobertura en el sistema sanitario (no tienen seguridad social) por lo que deben contratar las coberturas mediante seguros privados.
- En el Reino Unido utilizan otro tipo de sistema, establecido por tramos. Podemos encontrar de ese modo una tarifa reducida para aquellas empresas con bajos ingresos a lo largo del año. El importe de esta “cuota de autónomos” es de 10 libras al mes (13€ aprox.) siempre que facturen por debajo de las 5.075 libras al año (aproximadamente 6.000€). Si el empresario estima que puede sobrepasar esa cuota deberá pagar una cuota "compensatoria" que asciende a unos 58 euros. En el caso de sobrepasarse y no haber pagado la compensatoria deberá pagar un 8% de los ingresos de ese año. A cambio disponen de unas prestaciones básicas.
- En Francia las cotizaciones de la Seguridad Social de los autónomos se pagan mensual o trimestralmente, a elección del contribuyente. Sobre la facturación del mismo la cuota se calcula aplicando un 12% en las actividades comerciales, un 21,3% para los servicios y un 18,3% para las profesiones liberales. Las coberturas que se incluyen en esta cotización son la asistencia sanitaria, jubilación, incapacidad temporal y pensiones de viudedad e invalidez. Hay que destacar que la asistencia sanitaria se hace mediante el reembolso de gastos, los ciudadanos pagan al médico y luego el estado les reembolsa un porcentaje entre el 65% y el 100% del gasto.
- En portugal, se paga sobre los ingresos anuales, aproximádamente un 25,4% de la facturación de ese año. En Italia y Finlandia, que también se rigen por el mismo sistema, el pago asciende a un porcentaje del 20 y 21,59 por ciento anual respectivamente.
Como podemos observar existen importantes diferencias entre los diversos países en relación a las coberturas de la seguridad social, en cuanto a la cotización que era lo que se quería comparar, vemos como no existe el mismo mecanismo, algunos se rigen por el nivel de ingresos o facturación de la empresa, otros tienen únicamente un pago mínimo irrisorio y en otros no hace falta el alta en el sistema nacional de salud, cosa que no ocurre en España.
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